TDB Arquitectura-Juan Trias de Bes: Oficinas en Sant Cugat del Vallès
En un contexto marcado por la fuerte presencia de la autopista que enlaza Girona y Francia, se debía alzar un edificio de unos 10.000 m2 de techo. Ante la imposibilidad de generar espacios urbanos propios, se decidió establecer un diálogo entre el usuario y el entorno disperso y diverso. Se trata de comprender las percepciones visuales entre el interior del edificio y el exterior. A partir de aquí surgen todas las consideraciones constructivas, pues el recurso se concentra entre la contraposición de lo estático y lo dinámico, entre la firme y objetiva estructura de hormigón y el suave y subjetivo cortinaje metálico:
Entre la paralepípeda construcción cúbica y la envolvente ingrávida, se establece una clara estrategia constructiva, que ha permitido una contratación paquetizada y concatenada, con ausencia de interferencias entre la estructura y el velo exterior. La concentración de recursos es notoria, y la contraposición matérica, también. Se evidencia que la construcción es el soporte de la arquitectura.
El edificio será percibido, por la mayoría de observadores, desde el vehículo que circula por las rápidas vías colindantes, a una gran velocidad. Así, la envolvente no puede mostrarse mediante recursos de percepción estática como ocurre en el centro urbano. Incluso los usuarios de las cercanas pistas deportivas estarán en permanente movimiento. Por ello, la envolvente se muestra atendiendo y enfatizando el movimiento de quien lo observa, como acompañando un moviendo de verónica. Mientras, el usuario que permanece estático observa la tangencialidad del movimiento exterior, discerniendo entre lo que se aproxima o se aleja.
El edificio responde a lo lumínico en cuanto a lo diurno y lo nocturno. Si durante el día filtra la luz, protegiéndolo de la radiación solar directa, por la noche emite una suave cortina de aura que acompaña al viajero y distrae de lo que acontece en su interior.
La preocupación por la privacidad está presente desde el exterior, pero intimidad no implica incomunicación. El edificio protege a sus ocupantes, pero atiende al que le dedica su mirada.
Dirección: Avda. Via Augusta s/n.Sector C. Can Bellet. Sant Cugat del Vallés.
Consultores: Estructuras: Static, Instalaciones: grupo JG, Iluminación: Artec, Arquitecto técnico: Ricardo Villoria
Colaboradores: Maria Barcina, Marta Pascual, Carles Guilera
Área: 10.539 m2
Presupuesto: 6.405.750 €
Fotografía: Alejo Bagué
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