Josep Llobet arquitectes: Restauración exterior de Can Negre

El origen de Can Negre, era una masía del S-XVII, en el área municipal de Sant Joan Despí, muy cerca de Barcelona, estaba totalmente rodeada de terrenos de cultivo. Era la casa solariega más cercana a la capilla del Buen Viaje, con restos del S-XIII.
Pere Negre i Jover, abogado de Barcelona, era hijo de Sant Joan Despí, y tenía grandes propiedades en el pueblo, que había heredado de su familia.
La primera ampliación de la casa acontece en 1680, cuando Josep Negre la hace ampliar por su parte izquierda.
A principios del siglo XX, el arquitecto Jaume Gustá Bondia, ampliará la parte izquierda, haciendo más grande la bodega, y construyendo en la parte superior una habitación y una galería, rematada con una azotea.
Josep Maria Jujol Gibert inicia sus obras en la casa en 1915, su duración será hasta el año 1926 que finalizarán con la construcción del oratorio.
Todas las fachadas de la masía quedarán reformadas, pero la fachada principal será en la que habrá el trabajo mas importante, es una clara evocación a la Madre de Dios, donde antiguamente estaba grabada su imagen, en el vidrio central de la tribuna.
A lo largo de los tiempos, hasta el día de hoy, los terrenos originales que rodeaban la masía se convierten en urbanos de suelo edificable, y la casa queda rodeada de construcciones, fruto del crecimiento del pueblo de Sant Joan Despí y de la reparcelación y urbanización de algunos terrenos que pertenecían al señor Pere Negre. Como consecuencia la casa queda delimitada por dos calles laterales, la Riera de Can Negre, la calle Corazón de la Flora y la actual Plaza de Cataluña, antiguo jardín que rodeaba la masía.
Nuestra intervención ha sido la recuperación y restauración de las 4 fachadas, con todo el que las acompaña.

Emplazamiento: Pça Catalunya. Sant Joan Despí, Barcelona

Consultores: arquitecto técnico: Judith Dabant

Colaboradores: Anna Roque, Anna Prats, Natàlia Ojeda

Área d’intervención: 290,40m² contacto casa con terreno, 685,00m² fachadas

Fotografía: Josep Llobet. Fotografía de la silla: Lluís Bernat